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Colonos israelíes continúan arrasando la tierra palestina en el norte del Valle del Jordán

Traducción no oficial

Foto de archivo
VALLE DEL JORDÁN, viernes, 20 de mayo de 2022 (WAFA) – Durante casi un mes, los colonos israelíes han estado arrasando las tierras de cultivo palestinas en Khirbet al-Farisiya, en el norte del Valle del Jordán, según un activista local de derechos humanos.

Aref Daraghmeh dijo que las excavadoras de los colonos continuaron arrasando grandes extensiones de tierras de cultivo pertenecientes a los aldeanos como preludio para apoderarse de ellas y construir infraestructura, incluida una escuela, como parte de la expansión del asentamiento colonial invasor de Sal’it.

Advirtió que las actividades de los colonos en la zona sirven como el primer paso hacia el desplazamiento de la población indígena palestina.

El Valle del Jordán, que es una franja de tierra fértil que corre hacia el oeste a lo largo del río Jordán, alberga a unos 65.000 palestinos y constituye aproximadamente el 30% de Cisjordania.

Desde 1967, cuando el ejército israelí ocupó Cisjordania, Israel ha trasladado al menos a 11.000 de sus ciudadanos judíos al Valle del Jordán. Algunos de los asentamientos en los que viven se construyeron casi en su totalidad en tierras palestinas privadas.

El ejército de Israel también ha designado alrededor del 46 por ciento del Valle del Jordán como zona militar cerrada desde el comienzo de la ocupación en junio de 1967, y ha estado utilizando el pretexto de ejercicios militares para desplazar por la fuerza a las familias palestinas que viven allí como parte de una política de la limpieza étnica y sofocar el desarrollo palestino en la zona.

Aproximadamente 6.200 palestinos viven en 38 comunidades en lugares destinados a uso militar y han tenido que obtener permiso de las autoridades israelíes para entrar y vivir en sus comunidades.

En violación del derecho internacional, el ejército israelí no solo desplaza temporalmente a las comunidades de forma regular, sino que también confisca sus tierras de cultivo, demuele sus casas e infraestructura de vez en cuando.

Además de sufrir un desplazamiento temporal, las familias palestinas que viven allí enfrentan una miríada de restricciones en el acceso a recursos y servicios. Mientras tanto, Israel explota los recursos del área y genera ganancias al asignar generosas extensiones de tierra y recursos hídricos en beneficio de los colonos.

Los políticos israelíes han dejado claro en varias ocasiones que el altamente estratégico Valle del Jordán permanecería bajo su control en cualquier eventualidad.