Responsables israelíes anunciaron el miércoles que van a expropiar terrenos propiedad de los palestinos en el Jerusalén Este ocupado y expulsar a 120 civiles beduinos que viven allí con el fin de crear un vertedero, señaló el diario israelí Haaretz.
El Comité de Planeamiento creado por las autoridades de la ocupación israelí ha decidido crear este vertedero que ocupará un territorio adyacente a varios barrios palestinos, incluyendo el campo de refugiados de Shoafat y la vencidad de Issawiya.
El plan prevé, según Haaretz, “la expropiación de una gran extensión de tierra perteneciente a palestinos, unos 130 acres”. Esto sucederá además en un territorio que pertenece a los palestinos, según la ley internacional y las resoluciones de la ONU.
Por otro lado, el plan prevé crear un parque sobre ese lugar una vez que el vertedero se llene, pero los palestinos no podrán utilizarlo, ya que un muro de separación bloqueará su acceso desde los barrios palestinos mencionados.
Ésta es la primera gran expropiación de tierra palestina por parte del Estado israelí en el Jerusalén Este ocupado desde 1991. Esto ya llevado ya a las organizaciones pro-derechos humanos a presentar quejas que señalan que la colocación del vertedero a unas pocas decenas de metros de miles de hogares palestinos viola las regulaciones medioambientales internacionales e israelíes y producirá la contaminación de una zona habitada.