Una diputada árabe del parlamento israelí tachó el martes de “crimen contra la humanidad” la encarcelación de menores por el régimen de Tel Aviv, tras visitar a la prisionera palestina más joven, Malak al-Jatib, de 14 años de edad, recluida en la cárcel israelí de Hasharon, en el norte de Cisjordania ocupada.
Al-Jatib es la más pequeña entre los 214 menores palestinos que se encuentran en centros israelíes de detención. Fue arrestada el 31 de diciembre, siendo una de los 1800 niños detenidos durante 2014.
La legisladora, Hanin Zoabi, citada por el portal ‘Palestine info’, calificó a la niña de valiente, y dijo que tenía una alta moral pese a que llevaba unos grilletes en las piernas. Solo echa de menos a su familia y su aldea, agregó a continuación.
Malak fue detenida mientras regresaba de su escuela a casa, en la ciudad cisjordana de Ramallah, tras ser acusada de lanzar piedras y estar en posesión de un arma blanca, cargos considerados “ridículos” por su padre.
La semana pasada, una corte israelí sentenció a la niña a dos meses de prisión y una multa condicional equivalente a 1500 dólares.
De acuerdo con Zoabi, la detención de menores es uno de los crímenes de lesa humanidad que comete el régimen de Israel. “Los niños palestinos son usados como rehenes para reprimir a la Resistencia palestina”, afirmó.
Además, la parlamentaria denunció el hecho de que las autoridades judiciales israelíes no permitieran que el abogado y los padres de Malak participaran en la investigación, lo que contraviente el derecho internacional.
Según el Ministerio palestino para Asuntos de Prisioneros, actualmente, unos 7 mil palestinos están encarcelados en las prisiones del régimen israelí y viven en condiciones infrahumanas.