X

Amnistía Internacional denuncia crímenes de guerra en Gaza y ocupación de Israel en ‪‎Palestina

Londres, (EFE).- El Ejército israelí cometió “crímenes de guerra y violaciones a los derechos humanos” en la Franja de Gaza durante una ofensiva militar del año pasado en la que murieron 1.500 civiles y mantuvo la ocupación en Cisjordania, según el informe de Amnistía Internacional (AI) difundido hoy en Londres.

El dossier de AI sobre los derechos humanos en el mundo denuncia que durante 2014 Israel continuó su férreo bloqueo a Gaza (impuesto en 2007), lo que supuso “un castigo colectivo a sus 1,8 millones de habitantes” y en Cisjordania prosiguió la construcción de la valla/muro y los “asentamientos ilegales”.

La operación “Margen Protector”, que Israel declaró haber lanzado el 8 de julio contra Gaza por el aumento de los disparos de cohetes de grupos armados palestinos contra territorio israelí, “mató a más de 2.000 gazatíes, entre ellos más de 1.500 civiles, de los que unos 539 eran niños”, según el informe.

AI califica de “ataques desproporcionados e indiscriminados contra zonas civiles dénsamente pobladas”, algunas de las operaciones que efectuó durante los 50 días de ofensiva militar israelí que también ocasionó miles de heridos, 110.000 desplazados internos y “miles de viviendas” destruidas.

Dentro de esos ataques AI incluyó los realizados contra “escuelas que ofrecían refugio a civiles y contra otros edificios civiles que, según las fuerzas israelíes, Hamás usaba como centros de mando o para almacenar o disparar cohetes”.

AI documenta ocho casos de ataques a viviendas habitadas palestinas, hospitales y “trabajadores de ambulancias que intentaban socorrer a los heridos o rescatar los cadáveres”.

Las tensiones habían reavivado el conflicto en julio, tras el homicidio de al menos 15 palestinos a manos de las fuerzas israelíes desde el comienzo del año, el secuestro y el homicidio de tres adolescentes israelíes en Cisjordania, perpetrados por palestinos afiliados a Hamás, y el homicidio de un joven palestino a manos de israelíes como represalia.

A su vez, los proyectiles lanzados por los milicianos palestinos “mataron a seis civiles, entre ellos un niño, e hirieron a decenas” en Israel, recuerda AI.

En Cisjordania, el Ejército israelí mantuvo “restricciones opresivas de la libertad de circulación de la población palestina”, promovió los “asentamientos ilegales” y permitió a los colonos israelíes atacar a la población palestina “con impunidad casi absoluta”.

Arrestó a miles de palestinos, algunos de los cuales denunciaron haber sido torturados, mantuvo bajo detención administrativa sin juicio a alrededor de 500 y demolió, como medida punitiva, viviendas de familiares de palestinos que habían efectuado ataques contra israelíes.

En Israel, las autoridades encarcelaron a al menos seis objetores de conciencia israelíes por negarse a cumplir el servicio militar obligatorio.

Y “siguieron negando el acceso a procedimientos justos para la determinación de la condición de refugiado a los ciudadanos eritreos y sudaneses, que representaban más del 90 % de los 47.000 africanos solicitantes de asilo en Israel.

Al concluir el año, tan solo dos eritreos y a ningún sudanés habían obtenido el estatuto de refugiado.