Traducción no oficial
TUBAS, lunes 26 de abril de 2021 (WAFA) – Ayer domingo, en un precedente, el primero de su tipo en la región, siete propietarios palestinos de puestos de verduras en el Valle del Jordán recibieron notificaciones del Consejo de Asentamientos de Israel para retirar sus puestos.
Los observadores creen que este paso es una implementación del plan de anexión sobre el terreno y el desencadenamiento del Consejo de Asentamientos en el Valle del Jordán al otorgarle poderes administrativos y el derecho a actuar de la forma que considere adecuada en los territorios palestinos ocupados.
Ibrahim Daraghmeh, uno de los propietarios de puestos, dijo que estaba sorprendido de que los colonos del Consejo de Asentamientos le entregaran avisos por escrito ordenándole a él y a otros propietarios de puestos que retiraran sus puestos y los multasen.
Le dijo a WAFA que en los últimos dos años, los soldados de ocupación han demolido sus puestos dos veces, pero esta es la primera vez que reciben notificaciones del Consejo de Asentamientos. En épocas anteriores, la llamada Administración Civil, un brazo del gobierno militar israelí, les entregó las órdenes.
Daraghmeh explicó que estos puestos son todo lo que tienen para ganarse la vida para sus familias y demolerlos significa perder su única fuente de sustento.
Ahmad Fuqaha, otro dueño de puesto, explicó que los miembros del Consejo de Colonos no solo les entregaban las notificaciones por la mañana, sino que regresaban por la noche y los amenazaban a punta de pistola.
Dijo que tiene socios en el puesto donde trabaja y que de él viven tres familias, por lo que demolerlos significa perder la única fuente de sustento para estas familias. Hizo hincapié en que este es el único trabajo que queda disponible para ellos, todos los residentes del Valle del Jordán, después de que la ocupación israelí y los colonos hayan restringido sus medios de vida a un punto en el que ya no podrían trabajar en el pastoreo, la cría de ganado o la agricultura después, cerrando grandes áreas de las tierras del Valle del Jordán, apoderándose de ellas y yendo tras los pastores.
El activista de derechos humanos Aref Daraghmeh confirmó que esta es la primera vez que el Consejo de Asentamientos actúa individualmente y emite notificaciones que afirman que estos puestos están ubicados en un área bajo la autoridad del Consejo de Asentamientos, señalando que los puestos están ubicados cerca del norte y pueblos centrales del Valle del Jordán.
Consideró lo sucedido como un proceso para imponer una política de facto en el Valle del Jordán al otorgar el derecho de administrar el área y actuar en ella al Consejo de Asentamientos, un paso hecho con la complicidad y planificación del gobierno de ocupación desde los Asentamientos. El Consejo es parte de él y no toma ninguna acción sin el consentimiento del gobierno.
Qassem Awwad, que documenta las violaciones israelíes en la Comisión de Resistencia al Muro y los Asentamientos, dijo que estas notificaciones significan que el gobierno de ocupación otorgó poderes al Consejo de Asentamientos para tomar medidas administrativas relacionadas con los edificios y los residentes en el Valle del Jordán en interés de los asentamientos sin ningún tipo de respeto por los derechos palestinos, y estos poderes son consistentes con las ambiciones y planes de los colonos de apoderarse de toda la región.
Esto significa transferir indirectamente los poderes administrativos en estas áreas al Consejo de Asentamientos para que sea el órgano de toma de decisiones en el Área C de la Cisjordania ocupada, eliminando así cualquier oportunidad de desarrollo en esta área para los ciudadanos palestinos que tienen derecho a la tierra, mientras que al mismo tiempo otorga plenos poderes sobre estas áreas a los colonos, dijo.
Con este paso, el gobierno de ocupación israelí les da a los colonos las manos libres en el Valle del Jordán en general, lo que significa implementar el plan de anexión sobre el terreno diciéndoles a los colonos que pueden administrarlo como tierra israelí.
La parte peligrosa de este paso y sus consecuencias, según Awwad, radica en el cierre de grandes áreas del Valle del Jordán y ponerlas bajo la autoridad de los asentamientos con legislación del gobierno de ocupación, y segundo, que es más peligroso, es que quien se interponga en el camino de los proyectos de asentamiento en la zona será considerado infractor de la ley y será tratado directamente por el Consejo de Asentamientos.
Fuente: WAFA