El gobierno israelí está pronto a sancionar la construcción de 1.071 viviendas en asentamientos paramilitares en Cisjordania, afirmó la organización no gubernamental pacifista Shalom Ajshav (Paz Ahora, en hebreo).
De las nuevas viviendas, 339 serán erigidas en los asentamientos de Galgal y Almog, en el Valle del Jordán; y las restantes en Kfar Adumim, al noreste de la ciudad santa de Jerusalén, que los árabes llaman Al Quds, así como en Kochav Yaacov y Shilo, próximos a esa ciudad, donde está la sede provisional del Gobierno Palestino.
En las últimas semanas las autoridades palestinas han denunciado actos de vandalismo de los residentes en esas comunidades contra templos musulmanes y cristianos, agresiones contra la población autóctona y destrucción de sembrados de olivos.
La luz verde incluye el inicio de la fabricación de 732 casas en Modiin Ilit, el mayor asentamiento en Cisjordania, en el cual residen unos 58 mil emigrantes judíos ultraortodoxos.
El anuncio justo antes de la llegada a Jordania del secretario de Estado norteamericano, John Kerry, en gestiones para reanudar las negociaciones de paz, y a poco tiempo de la entrada en vigor de una directiva de la Unión Europea que prohíbe a sus miembros tener relaciones económicas y financieras con esos asentamientos.
Kerry se entrevistó el 16 de julio con el Primer ministro jordano, Nasser Judeh, y cenó en privado con el Presidente Palestino, Mahmoud Abbas, sin que haya trascendidos de los temas que trataron.
A principios de esta semana, palestinos y pacifistas israelíes chocaron con la policía en varias ciudades durante protestas por el programado desalojo de hasta 50 mil beduinos de sus tierras ancestrales en el desierto de Negev.
Las construcciones israelíes y el asentamiento de poblaciones en territorios ocupados por la fuerza militar constituyen crímenes de guerra de acuerdo a la legislación internacional vigente.
Fuente: Agencia Prensa Latina / 17 de julio de 2013