El director de Operaciones en la Margen Occidental de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (Unrwa), Felipe Sánchez, manifestó en Buenos Aires su confianza que habrá un compromiso mayor de Latinoamérica con esta misión.
Fuente: Agencia Prensa Latina
Sánchez llegó a la capital Argentina como parte de una gira que lo llevará también a Chile, y mediante la cual busca apoyos que permitan a la Unrwa enfrentar los desafíos que plantea el aprovisionamiento, apoyo y protección de cinco millones de refugiados palestinos.
“Suramérica, una región en crecimiento y cada vez más visible, y dentro de ésta, países como Argentina, que viene ganando proyección internacional, pueden dar una contribución importante no sólo a este tema, sino también al proceso de paz en el Medio Oriente”, opinó en conferencia de prensa.
El alto funcionario insistió en la importancia de que Argentina “se articule en estos procesos”, sobre todo por el papel que jugará cuando asuma como miembro no permanente del Consejo de Seguridad de la ONU y por su activo rol en bloques integracionistas como el Mercosur, la Unasur y la Celac.
Manifestó además su satisfacción por el encuentro sostenido ayer en la Cancillería, el cual -dijo- transcurrió en un ambiente muy agradable y positivo y permitió identificar algunos pasos a seguir para fortalecer la relación.
También la víspera, Sánchez y Paz Fernández, del departamento de Relaciones Exteriores y Proyectos de la Unrwa, sostuvieron una reunión con miembros del Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales, ante quienes expusieron detalles de la labor que despliega esa agencia de Naciones Unidas.
Con relación al proceso de paz palestino-israelí, y a una pregunta de Prensa Latina, Sánchez manifestó su preocupación porque no se registran avances.
Otros eventos dramáticos que están ocurriendo en la región han desplazado la atención de los medios y de la opinión pública del que, sin dudas, sigue siendo el asunto político internacional de más relevancia y el principal determinante de la estabilidad en el área, que es ese proceso de paz, insistió.
“Esta situación”, agregó, “provoca un estancamiento todavía más dramático en uno de sus componentes más críticos, la cuestión de los refugiados, la cual urge colocar en el centro del proceso político”, estimó.
Con relación a la labor de Unrwa, detalló que la mayor parte de sus esfuerzos y recursos económicos (provenientes de países donantes) son destinados a la educación y destacó que cuentan para ello con 700 escuelas donde aprenden medio millón de niños.
“También proveemos cuidados médicos primarios mediante un eficaz programa que permite atender a una persona a un costo de 20 dólares por año, en comparación con el nivel de 32 de la Organización Mundial de la Salud.”
Unrwa, además, ha puesto en marcha el programa de micro-finanzas de más rápido crecimiento en la región, con más de 300 millones de dólares en pequeños préstamos desembolsados en los últimos 20 años, “y continúa teniendo en el alivio de la pobreza su preocupación central”, puntualizó.