Fuente: Alejandro Tapia C., La Tercera – Chile
El líder de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) viste botas altas y negras, está de buen ánimo y observa un informe de la cadena BBC sobre el conflicto palestino-israelí en un plasma gigante en un amplio salón del lugar. Fue aquí donde Yasser Arafat resistió los ataques israelíes de 2002 y es aquí donde se encuentra su tumba, que está siendo reconstruida.
Con la idea de retomar las negociaciones con Israel, el 17 de abril pasado Abbás le envió una carta al primer ministro Benjamin Netanyahu para sentarse nuevamente a la mesa. El Presidente palestino instó a sus vecinos a aceptar la solución de dos Estados y frenar la construcción de asentamientos en Cisjordania. Los dirigentes esperan ahora la respuesta israelí, aunque no tienen muchas esperanzas. El domingo, Abbás le describió la difícil situación que enfrenta su administración a un grupo de nueve senadores chilenos, a quienes recibió en la Mukata.
“El problema radica en el primer ministro israelí. Él no está convencido de la visión de dos Estados ni tampoco del cese de la colonización; por lo tanto, las negociaciones están estancadas. Las colonias israelíes se están tragando nuestro territorio. Nosotros queremos obtener nuestro Estado a través de negociaciones pacíficas, no queremos violencia ni terrorismo”, señaló Abbás.
El gobernante palestino reconoció que la Primavera Arabe abrió un nuevo escenario y que “esta es la hora óptima para la paz y se lo hemos dicho a Estados Unidos, porque nadie sabe lo que pueda pasar mañana”. Antes de retomar su trabajo y despedirse de los legisladores, el sucesor de Arafat se tomó un tiempo para responder las preguntas de La Tercera, que viajó a Ramala en el marco de una invitación del Gobierno Palestino y la Comunidad Palestina de Chile.
¿Cuáles son las condiciones del gobierno palestino para sentarse nuevamente a la mesa con Israel con miras a negociaciones de paz?
No tenemos precondiciones. Lo que queremos simplemente es que Israel cumpla realmente con sus promesas. Cuando pedimos el cese de la colonización, es un asunto obligatorio. Para el gobierno israelí no es una precondición. Queremos llegar a un acuerdo político, y llegar a un acuerdo con nuestros vecinos israelíes para convivir codo a codo en armonía y paz. Pero exigimos el cese de las actividades colonialistas.
¿Sin el congelamiento de los asentamientos no hay posibilidad de diálogo?
Es muy difícil eso. Deben parar la colonización. Hay que demarcar las fronteras y que cada uno reconozca a su país. Hay que tener dos Estados sobre la base de las fronteras de 1967.
¿En qué pie está el proceso interno de reconciliación palestina y la idea de convocar elecciones conjuntas entre Hamas y Al Fatah?
Hasta ahora realmente Hamas no ha cumplido sus promesas.
¿Los comicios se van a llevar a cabo en el corto plazo?
Hemos acordado con Hamas tomar pasos, y cuando Hamas tome esas medidas y cumpla esos pasos, vamos a tener elecciones pronto.