El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, se mostró irritado por las críticas a su política de alterar la esencia árabe y musulmana de Jerusalén, particularmente las del Presidente palestino, Mahmoud Abbás.
Fuente: Julio Pérez, Radio Habana Cuba
Netanyahu, cuyo gobierno derechista ha impulsado la ampliación de los asentamientos judíos en los territorios ocupados de Cisjordania y Jerusalén, calificó de discurso incendiario las palabras pronunciadas el domingo 26 de febrero por el Presidente Abbás en una conferencia que tiene lugar en Catar.
Pese a que su administración ha llevado al estancamiento de las negociaciones con la Autoridad Nacional Palestina (ANP), el primer ministro opinó que, según él, la postura de Abbás socavaría los esfuerzos de paz con el Estado sionista.
Al hablar en la conferencia internacional sobre Jerusalén, Abbás denunció a Tel Aviv de buscar destruir la mezquita Al-Aqsa, considerada el tercer lugar sagrado del Islam.
Igualmente, denunció que Israel lleva a cabo en los últimos años una batalla final encaminada a la limpieza étnica para borrar el carácter árabe, musulmán y cristiano de Jerusalén Este, ocupado en 1967 y donde los palestinos instalarán la capital de su próximo Estado.
Por lo mismo, recabó ayuda para evitar que los palestinos sean convertidos en una minoría en su propia ciudad, e invitó a toda la comunidad árabe musulmana a visitar la Ciudad Santa.
Netanyahu, por su lado, expresó disgusto por la presencia del enviado especial del secretario general de la ONU para Medio Oriente, Robert Serry, en la conferencia de Doha, y la denuncia del grupo israelí de derechos humanos BTSelem sobre la judaización de la urbe.
BTSelem indicó que la meta primaria del gobierno de Israel en Jerusalén ha sido crear una situación demográfica y geográfica injusta, aumentando el número de judíos y reduciendo el de palestinos.
Abbás también afirmó que el gobierno sionista pretende construir en la ciudad anexada un templo judío sobre las ruinas de Al-Aqsa, tema por el cual fue asesinado un joven palestino por la policía de Israel.